Nicolás Fernández (-42kg) y Valeria Coronado (-44kg) obtuvieron el oro en sus respectivos pesos mientras que Adriana Coronado se hizo con la plata en -52kg
Santiago volvió a convertirse en tierra de éxitos para Judo Club Avilés de la mano de una generación que lleva tiempo haciendo bien las cosas y que está llamada a seguir escribiendo páginas doradas en la historia de la entidad. La Copa de España Infantil coronó a Nicolás Fernández y Valeria Coronado en -42kg y -44kg, respectivamente y Adriana Coronado obtuvo una medalla de plata en -52kg.
Tanto en lo global como en lo particular el entrenador Ricardo García se mostraba “orgulloso” del papel desempeñado, aunque no fue el mejor día: “Es otra cita más donde los infantiles demuestran su estado de forma y eso que ellas tienen mucho más judo para mostrar. Las tres hicieron una muy buena competición si miramos únicamente los resultados, pero pueden ofrecer más judo”.
En categoría masculina, Nicolás Fernández volvió a marcar el ritmo en su peso, tanto en la liga como en las eliminatorias finales y eso que “había rivales como él, con una estructura definida y que saben hacer buen judo, pero supo aprovechar sus oportunidades y no cedió”. El ‘debe’ está en Hugo Viña (-55kg) y Guillermo Fernández (-42kg) que no consiguieron pasar a la fase final. En ambos casos, García señala que les faltar “confiar en sí mismos”. En el caso de Viña, “le cuesta, una vez tiene dominado el kumi, convencerse de que puede proyectar” y en el de Guillermo algo parecido porque “gana el último combate de los tres que disputa con un gran judo y ahí es donde le queda mal sabor de boca por no haber reaccionado antes”.
En categoría femenina, las hermanas Coronado volvieron a estar entre las mejores con un oro para Valeria y una plata para Adriana. A la primera le tocó sufrir en semifinales y final, “pero con esa manera que tiene ella de poner la carne en el asador se llevó por delante a los rivales” mientras que la segunda hizo “una muy buena competición, aunque sufrió con algunas situaciones de kumi donde no desarrolló todo el judo que tenía. En la final le toco una rival complicada y quizá costó leer la táctica para llevarlo a nuestro terreno”. El único ‘pero’ fue para Laura Iglesias con la falta de una presea que “la tuvimos ahí, pero cayó contra una rival que ya le había ganado en otras citas y creo que eso le pudo mermar mentalmente porque el combate lo tuvo controlado. No se lo acabo de creer y en un descuido la inmovilizaron”.
Sector sin triunfo
El mismo escenario sirvió para la disputa del sector donde Illán Gutiérrez (-66kg) se volvió de vacío tras cosechar dos derrotas. La competición la abrió con el gallego de Judo Club Coruña Carlos Infanzón, un rival complejo que acabó metiéndose en la final “al que empezó ganando, pero nos acabó remontando con un trabajo de koshi jime que perdimos por estrangulación”. Posteriormente hubo opción de repesca ante otro gallego Tiago Larramendi: “Cada uno tuvo sus opciones, pero en el golden score nos metió un yuko que nos sacó de la competición”.