La judoka de JCA obtiene dos bronces en la Supercopa de España Cadete y en el campeonato Junior mientras Alejandra Pérez se ha subido al segundo cajón del podium en la cita vespertina

La primera jornada para Judo Club Avilés se cierra con un regusto amargo, al menos para su entrenadora. Tres metales no son suficientes para Raquel Pascual que debutaba en el Villa como entrenadora del equipo avilesino. “No es satisfactorio porque esperaba más medallas. Al final esto demuestra que hay un ciclo y cambio que está por venir y estamos en ello. Los cambios no son fáciles y hay que seguir trabajando porque no es suficiente”. La catalana sí considera que Burgos “es la que más caso hace cuando le doy indicaciones desde la silla, como Saúl Fernández. Me miran en cada mate, hacen exactamente lo que les digo, nos entendemos con una mirada. Lo más duro es el Villa de Avilés, lo supera todo y tiene más nivel que todo lo que puede venir”.

Para Pascual las medallas pueden suponer un impulso o no. “Hay dos tipos de personas: las que se motivan cuando han perdido y las que se desmotivan. Llevo tres meses con ellos y me falta ver la actitud que viene ahora. Los que han ganado medalla si les ha motivado o que se vengan abajo”. En cuanto a su debut, promete “trabajo, ilusión y seguir por la misma línea. Carlos (Fernández) nos ha visto por primera vez, ha tenido buenas sensaciones, pero siempre quiero su opinión porque el que tiene experiencia es él y no yo”.

Dos bronces para Raquel Burgos vienen a refrendar el quinto puesto de la cita en Vigo. En el caso de la Supercopa, se da la casualidad de que el metal ha llegado en el mismo tatami que lo obtuvo su hermano Rodrigo hace un año. “No me lo esperaba. Venía con muchas ganas de hacer el cadete y sacar medalla. Cuando fui al Junior pensé que podría intentarlo y al final combate tras combate lo logré. El primero me da rabia porque lo podía haber ganado. Mi rival, Claudia Lora, solo cogía y bajaba abajo con fuerza de zurda”. Para Burgos la medalla es un chute porque la próxima cita será Gijón y tiene las ideas claras: “Puedo llegar a quedar primera en Asturias y en las citas estatales como Tenerife puedo estar en buena posición”.

En el caso de Alejandra Pérez, la plata del Junior tampoco convence del todo a la avilesina. “En el primer combate con Paula Coloma me encontré muchas ganas, pero en el segundo contra Leonor Costa me faltó un poco más de agresividad y control sobre los ataques”, ha apuntado y es que se llegó a ver con el oro: “La plata me sabe a poco porque en la final me vi con ganas y en la mitad del combate pensé que podía, pero por falsos ataques no pudo ser.