Saúl Fernández, Raquel Burgos y Alejandra Pérez se subieron a lo más alto del pódium dando continuidad a los buenos resultados que vienen realizando durante la temporada

Llegaba la cita del Complejo Deportivo de El Quirinal con la expectación por parte del entrenador Carlos Fernández de ver cómo se comportarían los pupilos sobre el tatami y el resultado final no ha satisfecho al técnico avilesino. Pese al número de metales -tres otros de Saúl Fernández, Raquel Burgos y Alejandra Pérez; una plata de Cruz y siete bronces de Noe Rodríguez, Lucas Pérez, Olaya Madrid, Alejandro Linares, Illán Gutiérrez, Luis Villabrille y Leo Potesta- el calificativo utilizado es el de “insuficiente”. Fernández lo basa en que, en algunos casos, “nos deja fuera de la posibilidades reales para la clasificación para el campeonato de España por méritos propios, es decir, primeros de cada peso. Quedamos pendientes de que la Federación Asturiana considere llevar a algunos segundos, pero ese no es nuestro ADN ni nuestro objetivo”.

El entrenador reconoce el mal papel de algunos de los judokas después de los resultados del pasado fin de semana. “Estamos un poco decepcionados porque llegábamos con algunas expectativas buenas. Cumplieron los de siempre como Saul Fernández, Raquel Burgos o Alejandra Pérez, pero me queda una sensación agridulce con otros competidores como Lucas Pérez, Lucas Madrid o Nel Suárez”. En el caso de estos últimos, Fernández entiende que deben moverse en el oro porque “las evoluciones tienen que tender a seguir mejorando. Están capacitados para ser oro en sus categorías porque así lo creemos y es por lo que hay que luchar”.  

El siguiente objetivo llegará dentro de aproximadamente un mes con el campeonato de Asturias. “No queda otra que seguir trabajando porque sí creemos que, aunque el resultado no ha acompañado, la línea de trabajo es buena. Quizá no de forma inmediata, pero soy más de pensar que lo que vi la semana pasada sea lo que se vayamos a hacer a partir de ahora. Nada nos va a apartar de esa línea para rendir cada fin de semana”. El entrenador asume que el judo “no son matemáticas y el buen resultado de un fin de semana no tiene por qué repetirse al siguiente, pero lo que nos queda es seguir trabajando para que triunfos como los de los sub21 puedan repetirse en el futuro”.

Fernández no se ha querido olvidar del apoyo de la grada, lleno en la mitad del pabellón abierto para la ocasión, sobre todo “con padres y judokas de la cantera del club, algunos alevines y benjamines. Es un dato muy relevante porque son las generaciones que vienen pisando fuerte por debajo de los infantiles y cadetes y verlos en las gradas animar a los que están por encima me recuerda a tiempos pasados”. La siguiente cita será el próximo fin de semana en Galicia con la segunda jornada de la Liga Oleiros donde benjamines y alevines aspiran a ratificar los buenos resultados del debut en la competición gallega.