El Alevín A se ha alzado con el subcampeonato y el B ha acabado en la décima posición tras un fin de semana de competición y diversión en tierras gallegas

El domingo se cierra de la mejor manera posible para los judokas del Judo Club Avilés con la medalla de oro en la Liga Norte para el equipo Benjamín, la plata para el Alevín A y un más que trabajado décimo puesto para el Alevín B que peleaba por una plaza entre la novena y la décimo segunda posición. El polideportivo José Antonio García Nieto de Canide (Mera) fue, una vez más, el lugar de encuentro para poner el broche a una temporada en la que los pequeños han vuelto a los tatamis tras dos años de pandemia.

El mayor triunfo se lo llevó el equipo Benjamín con Guillermo, Jorge, Joel, Aleix, Diego, Andrea, Olivia, Covadonga, Mili, Hugo, Jorge y Pablo. Pleno de victorias ante los equipos anfitriones, Judo Club Oleiros C y D y UDC Leones. Tres triunfos muy trabajados que llevaron al equipo de Carlos Fernández a alzarse con el campeonato y que viene a cerrar una liga en la que solo han cedido un empate a lo largo de las tres jornadas.

Para el Alevín A fue el subcampeonato, tan solo por detrás del Julio Rico, única derrota que anotaron en su casillero tras imponerse a Judo Club Oleiros C y D. El combinado compuesto por Nora, Saúl, Anxo, Ángel, Cruz, Nico y Adán llegaba con opciones al título tras haberse colado entre los cuatro mejores y luchó hasta el final obteniendo una plata que deja buen sabor de boca.

Por último, el Alevín B que integran Pedro, Cruz, Leo, Carlos, Sofía y Laura peleaba por acabar lo más arriba posible entre el noveno y el décimo segundo puesto. Finalmente se hizo con la décima posición tras anotarse dos victorias y una derrota. A destacar el papel de Sofía que plantó cara en todo momento en su combate y acabó cayendo por wazari tras quedar inmovilizada.   

El entrenador Carlos Fernández ha insistido en la premisa de que “queda trabajo por delante”. Sin embargo, se ha mostrado más que satisfecho por el papel de los suyos en el torneo ya que “se demuestra que hay un buen equipo y una buena generación que viene pisando fuerte” y por encima de todo ha puesto el foco en “la enorme evolución demostrada desde la primera jornada. Eso me importa más que cualquier título porque nos ha permitido hacer correcciones y basar el día a día de nuestro trabajo en esta liga”.

En el capítulo de los agradecimientos, además de los judokas, el técnico avilesino ha querido poner en valor el papel de los padres, “ese ingrediente de la ecuación que apoya a la cantera tanto en casa como en los desplazamientos y sin cuyo apoyo todo sería más complicado”. También al Judo Club Oleiros, “por la magnífica organización. Son campeonatos que nos ayudan a ver cómo evoluciona la base, detectar errores y trabajar sobre ellos para seguir mejorando. Cada vez que venimos a competir nos sentimos como en casa. Ahora les abrimos las puertas de la nuestra y les esperamos en Avilés”.

Más allá de los triunfos, el fin de semana ha servido al club para seguir haciendo piña y enfatizando el concepto de familia en el que tanto hincapié se hace con una jornada de sábado donde padres y judokas pudieron disfrutar de una visita al acuario de A Coruña, el Castillo de Santa Cruz y la Torre de Hércules; espacios todos ellos que hicieron las delicias de mayores y pequeños.